El pretérito imperfecto (del indicativo) es el también llamado por la palabra "copretérito" y no significa más que "con el pasado" en México y otros países de hispanoamérica ya que pretérito significa pasado en estos mismo lugares.
Esto es así porque en las lenguas romances (las derivadas del latín clásico) se añadió una forma compuesta al tiempo verbal que refiere el pasado, por lo que en los primeros estados de las lenguas romances (español, francés, italiano, etc.) existían al menos tres pretéritos: el imperfecto (amaba), el perfecto simple (amé) y el perfecto compuesto (he amado).
Con el tiempo algunas lenguas han perdido estas formas, por ejemplo en francés y en catalán el perfecto simple (amé) ha caído en desuso y se ha vuelto común decir "he amado" ocupando el perfecto compuesto y es el único que se usa en la práctica (como sucede también en parte con el alemán, donde el pretérito perfecto compuesto ha desplazado casi completamente al pretérito perfecto simple, perdiéndose con ello las sutiles diferencias semánticas entre ambos.
En catalán por el contrario ha surgido un nuevo pretérito perfecto "perifrástico" que ha sustituido al perfecto simple y por esto sólo aparece en textos arcaicos.
De este modo sí en español se pronuncia la oración "Pedro entraba cuando...", la acción de "entrar" está indicada como algo en proceso, sin definir si se completó esta acción o no, en ella no se sabe si Pedro llegó a entrar, solo que "eso hacía mientras...".
En contraste con la oración "Pedro entró", donde la acción sí se completó y donde se entiende que Pedro está definitivamente dentro.
Esta última forma se llama por ello pretérito perfecto (cumplido) simple, e indica que la acción sí fue completada.
Así cuando en español se dice "pretérito imperfecto" con la palabra "imperfecto" no se quiere decir nada más que "no cumplido" o "no terminado" y generalmente sirve para señalar dos acciones que ocurren al mismo tiempo, ocurriendo una de ellas como fondo de otra, la acción primaria es conclusa (perfecta) y la acción secundaria o de fondo continúa aun cuando la primera a terminado, como en: "Trabaje mientras llovía".
En esta última frase no sabemos si ha dejado de llover, pero sabemos que quien la enuncia a terminado de trabajar, por ello podemos identificar la acción "llover" como secundaria o de fondo (imperfecta) y "trabajar" como la acción primaria o perfecta (terminada), de esta manera una acción imperfecta puede ser fácilmente relacionada en la memoria por sus terminaciones recurrentes "ía" como en llovía o comía y con "aba", como en trabajaba, cantaba o cenaba.
En francés como en español el imperfecto se utiliza para expresar acciones pasadas y enfatizar su continuidad independiente respecto de otra acción que podemos llamar por su estado concluso "perfecta".
Pero este tiempo se utiliza sobre todo en la lengua escrita y se puede reconocer por las terminaciones "ais", "ais", "ait", "ions", "iez" y "aient" correspondientes a cada sujeto de la conjugación.
De este modo, es igual como en el español "cantaba" (pasado imperfecto), donde para conjugar con los sujetos no tenemos más que encontrar el presente de una acción como "canta" e insertar las terminaciones convenientes:
Yo cantaba, Él cantaba, Nosotros cantábamos, Ellos cantaban, Ustedes cantaban, Ellos cantaban; y podemos con este ejercicio identificar las terminaciones necesarias: aba, aba, ábamos, aban, aban, aban
Por ello en conclusión podemos observar que para su construcción solo hace falta tomar por raíz el presente de un verbo para añadirle una terminación establecida y voilà, el imperfecto se hace solo tanto en español como en francés.